domingo, 29 de enero de 2017

Flecha envenenada


LA PARÁBOLA DE LA FLECHA ENVENENADA: BUDA SOBRE PONER ATENCIÓN A LO QUE REALMENTE NOS OCURRE

La famosa parábola de la flecha envenenada ilustra la simpleza del sistema budista: ocuparse de lo que el momento dicta es el inicio del camino a la liberación.

Buda, al igual que maestros como Pitágoras, Sócrates o Lao-Tse, enseñó fundamentalmente una filosofía práctica, orientada a liberar al ser humano de la ignorancia y el sufrimiento. Estos grandes sabios coinciden también en que es baladí intentar definir aquello que es infinito, inefable e inconmensurable, puesto que cualquier cosa que digamos sobre lo Absoluto será solamente una proyección condicionada de nuestra mente. A veces es mejor ocuparse de cosas más sencillas: un camino de mil kilómetros empieza por un solo paso, como dice el Tao.

En el Majjhima Nikaya, una colección de textos atribuidos a Buda, que forman parte del Canon Pali, se cuenta la que ha sido llamada "la parábola de la flecha envenenada". La historia es contada por Gautama Buda aparentemente después de que un discípulo estuviera impaciente de escuchar del maestro las respuestas a las "14 preguntas sin respuesta", las cuales tenían que ver con cuestiones altamente metafísicas (como la eternidad del mundo, la vida después de la muerte, etcétera).
Hubo una vez un hombre que fue herido por una flecha envenenada. Sus familiares y amigos le querían procurar un médico, pero el hombre enfermo se negaba, diciendo que antes quería saber el nombre del hombre que lo había herido, la casta a la que pertenecía y su lugar de origen. Quería saber también si este hombre era alto, fuerte, tenía la tez clara u oscura y también requería saber con qué tipo de arco le había disparado, y si la cuerda del arco estaba hecha de bambú, de cáñamo o de seda. Decía que quería saber si la pluma de la flecha provenía de un halcón, de un buitre o de un pavo real... Y preguntándose si el arco que había sido usado para dispararle era un arco común, uno curvo o uno de adelfa y todo tipo de información similar............, el hombre murió sin saber las respuestas.
Esta es básicamente la parábola, si bien a veces es relatada con algunos más detalles, la esencia es esta. Evidentemente la actitud del hombre herido es absurda y podríamos pensar que es de una necedad inaudita, pero Buda nos diría que a la mayoría de nosotros nos está pasando algo muy similar pero no nos damos cuenta. 
De alguna manera todos estamos heridos con esa flecha envenenada --todos estamos muriendo-- y hacemos preguntas irrelevantes (por más que sean fascinantes), y le damos importancia a cosas que solamente nos desvían de nuestra realidad. Todos tenemos la oportunidad de salvarnos de esta herida --si abandonamos nuestra importancia personal-- pero pocos los hacemos.
Hay muchas cosas que son innecesarias --la verdadera espiritualidad consiste más en eliminar las cosas que son innecesarias que en penetrar construcciones metafísicas y obtener deslumbrantes conceptos filosóficos. 
De alguna manera Buda nos está sugiriendo que el camino no es a través de la mente y de sus especulaciones --la mente que es incesante en su duda y en su deseo y que teje laberintos espectrales a la velocidad del pensamiento-- sino que el sendero se abre a través de la acción que responde a lo que es necesario, la conducta en armonía con la Ley. 
Manly P. Hall comenta sobre esta parábola en su libro Buddhism and Psychotherapy:

En la parábola, la flecha es la tragedia inmediata, significando el egoísmo base que se ha convertido en el lugar común de la existencia moral... No nos damos cuenta de la gravedad de la herida, o estaríamos impelidos a remover la flecha inmediatamente, utilizando cualquier medio a nuestro alcance para liberarnos de los venenos que han sido colocados en la punta de la flecha. Mientras el ser humano viva apegado a un código de interés personal, justificando el error malinterpretando los patrones universales a su alrededor, nunca podrá conocer la libertad más allá del dolor.

[...] El budismo toma la posición de que cuando un hombre se da cuenta que está viviendo de manera incorrecta, es su obligación moral rectificar su carácter, y si no hace esto debe cosechar sus errores. Es completamente imposible para un ser humano romper las reglas de su especie y evitar el sufrimiento. Así que debe de decidir cuánto está dispuesto a sufrir, cuánto tiempo está dispuesto a ser infeliz y a vivir sin seguridad como resultado de su ignorancia o falta de valentía.

La parábola de Buda y el comentario de Manly P. Hall, nos invitan a examinar nuestra propia conciencia, nos llaman a atrevernos a ver lo que es evidente. 
¿Qué es lo necesario? 
¿Qué es aquello que debo hacer antes que otra cosa?

Quizá si meditamos --no es necesario tener gran técnica, sí lo es la sinceridad-- nos daremos cuenta que lo necesario, lo que justamente debemos hacer, es tan contundente como una flecha enterrada en el cuerpo.



domingo, 22 de enero de 2017

VIH y sus señales

8 señales tempranas del VIH que te ayudarán a combatir el SIDA a tiempo.

"Es preciso tener en cuenta que el virus se transmite por medio de los fluidos corporales. Puedes contraer VIH a través de relaciones sexuales sin protección....., por medio de tatuajes o perforaciones con herramientas sin la higiene adecuada....., o a los niños a través de la leche materna".

1. Dolor corporal
2. Dolor de garganta
3. Fiebre
4. Tos
5. Ganglios linfáticos inflamados
6. Dolores de cabeza
7. Erupción en la piel
8. Herpes



domingo, 8 de enero de 2017

Karma y Dharma

Cómo limpiar el karma y acumular Dharma

Para el Hinduismo y el Budismo, la experiencia de la vida no se limita a una sola existencia. La rueda de la vida o “samsara”, conectada al concepto de karma, no tiene principio ni fin, y por lo tanto después de la muerte hay otro nacimiento y una nueva vida – una y otra vez. Esto es lo que llamamos reencarnación.
La ley del karma dice que para cada acción, existe una consecuencia, es decir, es la ley de la causa y efecto. El karma se puede manifestar durante un ciclo de la rueda de la vida, o durante el siguiente – durante esta vida, o la próxima.

Para lograr un ‘buen karma’ o limpiar su karma acumulado, es necesario vivir de acuerdo al dharma, es decir, actuando correctamente y siguiendo las enseñanzas espirituales más elevadas. Toda acción que beneficie al individuo, a quienes lo rodean y a la humanidad en general, es considerado dharma y generará buen karma.

Cómo borrar o limpiar el karma
Hay diferentes maneras de acumular dharma y de limpiar el karma acumulado en nuestras vidas. Si seguimos cometiendo los mismos errores, seguiremos manifestando los mismos retos en nuestra vida.

A medida que seguimos las enseñanzas espirituales, podemos aprender las lecciones y balancear la rueda kármica.

Para acumular dharma y borrar el karma, es necesario:

Abrir nuestra conciencia

Dejar la culpa

Entender el sufrimiento

Respeto hacia si mismo y hacia los demás

Purificación

Dígale adiós al miedo

Humildad y perdón

Servicio

Descripción de los pasos a seguir (clic acá).




sábado, 7 de enero de 2017

Giardiasis (Parásito)

Giardia lamblia es un protozoario flagelado en forma de pera, que causa una amplia variedad de síntomas gastrointestinales.

Debido a que la giardiasis se transmite por contaminación fecal-oral, la prevalencia es mayor en poblaciones con condiciones sanitarias deficientes, el contacto cercano y prácticas sexuales oral-anal. La enfermedad es comúnmente transmitidas por el agua debido a que la Giardia es resistente a los niveles de cloro en el agua del grifo normal y sobrevive bien en arroyos de las montañas frías. Debido a que la giardiasis con frecuencia infecta a las personas que pasan mucho tiempo en el campo, excursionismo, o la caza, ha ganado los apodos de “diarrea del viajero” y “fiebre del castor”


La transmición por los alimentos es rara pero puede ocurrir con la ingestión de alimentos crudos o poco cocidos. La giardiasis es una zoonosis, y asegura una constante reserva en los castores, ganado, perros, roedores, y el borrego cimarrón.